El sector de la gastronomía de Uzbekistán ha experimentado un notable crecimiento en los últimos años, lo que ha propiciado la expansión de las cocinas europea y occidental. Naturalmente, también ha aumentado la demanda de tipos de productos que no se utilizan tradicionalmente en la cocina uzbeka. Un ejemplo de ello son las gambas. Este producto rico en proteínas y minerales, que sirve como sustituto de las importaciones, se cultiva en el distrito innovador de Qarshi.

Según datos del mercado, Uzbekistán importa actualmente 133,8 toneladas de gambas al año, valoradas en 794.600 de dólares. En el mercado nacional, el precio medio del kilogramo de gambas varía entre 19 y 22 dólares.

En 2023, la Agencia para el Desarrollo Innovador ayudó a la empresa Shrimp Factory-2022 CRL a poner en marcha un proyecto tecnológico de cría de camarón Vannamei, que permitió la producción nacional. La empresa produce ahora 7.000 kg de gambas al año, que suministra al mercado local a un precio medio de 180.000 sum el kilogramo.

Según el director de la empresa, Dilmurod Yuldashev, la expansión de la cría de gambas en Uzbekistán reducirá los costes de producción, haciendo el producto más accesible para los consumidores locales y satisfaciendo la creciente demanda de alimentos ricos en proteínas.

El proyecto se basa en tecnología iraní, utiliza estanques de 1-1,5 metros de profundidad, con entradas y salidas de agua enriquecidas con plantas acuáticas y sustratos. Y lo que es más importante, el sistema funciona con un consumo mínimo de agua.

Desde su puesta en marcha, el proyecto ha creado seis nuevos puestos de trabajo y se han entregado más de 2.130 kg de gambas a los clientes. La empresa colabora ahora con especialistas iraníes para ampliar la producción a 10.000 kg de gambas, con una inversión de 1.900 millones de sum.